Apatía Política

Apatía Política


Jóvenes de Bolivia luchemos por nuestra libertad y dependamos de nuestras acciones no del estado.


Rodrigo Garcia Alvarez

Coordinador de Estudiantes por la Libertad Bolivia


Bolivia se encuentra en una etapa difícil para la democracia, siendo esta vulnerada desde la llegada del socialismo del siglo veintiuno.

En las elecciones del 2005 la mayor parte de los votantes pertenecen a la generación X  y baby boomers, creyendo en el mensaje populista y esperando que el socialismo salve al país de la profunda corrupción de antiguos gobernantes.

Bolivia sucumbió ante el encanto de un estado benefactor el cual cambiaría el rumbo político y devolvería el dinero a las personas que si lo necesitaban, el encanto logro que el pueblo boliviano vote a favor del cambio de nuestra constitución, cambio que ocasiono el declive democrático en el que nos encontramos.

Nosotros Millenials al comprender la historia de nuestra nación, se esperaría que actuemos de forma diferente a nuestros antecesores, se esperaría que busquemos un cambio real en nuestra nación, se espera que seamos las personas que guíen el proceso para salir de un posible estado autocrático actual y volver a ser un estado de derecho.

Existe un peso el cual la juventud no está dispuesta a cargar, la apatía política que se halla en la generación Millenials es mayor de lo que se espera en un país en crisis. Es de extrañar que esta apatía se concentre en  la sede de gobierno, si la juventud Paceña actuara mas allá de la postura en las redes sociales, las generaciones anteriores comprenderían la profunda preocupación que existe sobre el futuro de Bolivia.

La juventud no tiene conocimiento sobre los candidatos que se presentaran en las elecciones del 20 de octubre, confiando en uno que propone las mismas ideas del gobierno actual. El problema probablemente se encuentre en que la mayor parte de la juventud se encuentra embelesada por los ideales de la social democracia, considerando que esta lograra una distribución correcta de la riqueza y podremos llegar a la justicia social.

Es extraño encontrar una confianza tan grande en la social democracia siendo que muchos jóvenes esperan ser emprendedores, esperan ser la nueva generación que genere mayores oportunidades de trabajo, esperando que puedan vivir de la innovación y de las ideas en las que puedan generar nuevos productos.

Al ser parte de la generación Millenial comprendo que dentro de nuestros ideales es el tener la libertad de cambiar de fuente laboral cuando esta no nos satisface, tener la posibilidad de emprender, errar e intentarlo nuevamente, buscamos tener la opción de alimentarnos intelectualmente para no depender de nadie en un futuro.

Si deseamos ser independientes en nuestra vida debemos comprender que un estado social demócrata solo busca que seamos dependientes de los que ellos puedan darnos.

El artículo es un llamado a la juventud boliviana para que indiquemos sobre política, economía, que conozcamos a los políticos del país, que conozcamos las intenciones que tienen para gobernar, que comprendamos que mientras mayor poder tenga un gobernante, mayor sea el tamaño del estado siempre seremos dependientes del mismo, que la pobreza y la corrupción incrementaran porque la distribución real de riqueza se genera dentro del mercado no por medio de un estado “benefactor”.

Es momento que busquemos nuevas ideas políticas para no repetir el mismo error de nuestros padres, de los jóvenes de otros países. Es momento de comprender que está en nuestras manos el futuro de Bolivia, que nosotros podemos conseguir un estado que asegure los derechos fundamentales, que la libertad y el respeto a la propiedad privada lograra que cada boliviano tenga la oportunidad de tener una mejor vida.

Jóvenes de Bolivia luchemos por nuestra libertad y dependamos de nuestras acciones no del estado.


Esta publicación representa únicamente las opiniones  del autor y no necesariamente la posición de Students For Liberty Inc.  En el Blog de Estudiantes por la Libertad abogamos por el respeto a la libertad de expresión y el debate de las ideas.